Citas a ciegas Jundiaí
Buenos Aires. Otras chicas encantadoras: Servicio de acompañantes Monte Grande, Voyeurismo Segovia, Aventuras sin promesas La Sagrera
Con el marco temporal, el autor buscó analizar las décadas de y A partir de la primera década del nuevo milenio, el marketing inmobiliario empezó a ver el elemento verde como un nuevo commodity en la comercialización de propiedades de alto nivel, con la aparente intención de recuperar la idea de paraíso perdido. Paulatinamente, este imaginario se traslada a las demandas inmobiliarias de otras clases sociales menos sofisticadas y con menores condiciones financieras.
Le atraía especialmente la representación recurrente de la naturaleza en los anuncios del mercado inmobiliario de alto nivel.
En los años 70 la naturaleza estuvo muy ligada a las ideas contraculturales del movimiento hippie, que abogaba por la vuelta al campo y a la vida comunitaria. El objetivo es crear una metaciudad, una ciudad dentro de una ciudad, que ofrezca diversos servicios a los residentes, permitiéndoles tener autonomía en estas islas de excelencia.
Lo que antes se veía como el estereotipo de una ciudad siempre gris y nublada adquiere ahora la connotación no menos estereotipada de una ciudad que vive en comunión con sus parques, jardines y zonas verdes. En esencia, la tesis trabaja con el poder de seducción que los anuncios buscan expresar.
Se detiene en la falta y el alejamiento de la naturaleza que la publicidad construye como mito y lenguaje, que resalta estas necesidades y este deseo por la naturaleza. Ante la escasez de lo verde, la lógica publicitaria propaga y publicita una ideología emocional y de mercado en constante proceso de expansión. Estos espacios privilegiados para ciertos segmentos sociales, segregados y aislados, a menudo delimitados por la creación de una frontera verde, forman metaciudades.